La higiene de la memoria

Teniendo como lugar la iglesia de Sant Martí de Solamal en la Vall de Bianya (Cataluña), el proyecto La higiene de la memoria se desarrolla a través de un video proyectado en el ábside de la iglesia en un ambiente oscuro, donde se ven dos manos introduciendo una fotografía de la misma iglesia en el agua de una pica bautismal. Una vez que la imagen está completamente dentro, el sonido de las campanas la iglesia “intervienen” y “distorsionan” la imagen durante unos segundos, repitiéndose una y otra vez. 
El proyecto propone el concepto del agua como elemento central de la obra, ya sea como elemento litúrgico-religioso, o como herramienta para la desaparición de la imagen, en el momento en que la vibración sonora interviene de tal manera la imagen que trastorna su atmósfera y al mismo tiempo, desintegra la imagen. 
Por otro lado, el proyecto alude a gestos que forman parte de la vida cotidiana e incluso de la historia; como el de un creyente que al entrar en una iglesia toca el agua bendita de la pica y se persigna, o la acción de “lavarse las manos” como metáfora del desprecio por algún hecho o situación, gesto que también contiene una fuerte carga bíblica y importancia histórica. 
Finalmente, como su nombre lo dice, La higiene de la memoria pone en diálogo una serie de conceptos que giran en torno a la imagen del agua, de la higiene “en sí misma” en su uso para la representación, intervención y desaparición de la memoria de un sitio geográfico.